Descubra el detrás del auge de los juegos de mesa en pandemia

 

A un año de iniciarse el confinamiento social en Colombia y el mundo, millones de familias en el país tuvieron que trasladar gran parte de sus actividades cotidianas al hogar; desde el trabajo, pasando por el desarrollo profesional y académico, hasta los momentos recreativos y de entretenimiento, tanto individuales como en grupo. 

De modo que, factores asociados a la coyuntura como el incremento de la carga laboral, las responsabilidades propias del hogar e incluso la pérdida de empleos incrementaron la tensión en las relaciones interpersonales en el núcleo familiar, explica el informe sobre vivencias familiares durante el confinamiento por COVID-19 realizado por el Instituto de La Familia de la Universidad de La Sabana. 




Sumado a lo anterior, el crecimiento exponencial del uso de dispositivos móviles e internet incentivó al mismo tiempo que en muchos hogares se implementaran alternativas, principalmente de entretenimiento, a modo de escape de la rutina y con el fin de conservar una buena relación entre los miembros de la familia. Una de ellas, por ejemplo, fueron los juegos de mesa, los cuales se popularizaron por su practicidad, accesibilidad a través de canales digitales, uso intuitivo y facilidad para integrar a la familia.

Según Hasbro, compañía líder en la categoría de juegos de mesa, hubo semanas en el 2020 en donde las compras se triplicaron en comparación con 2019. Por lo tanto, desde su perspectiva, estos son algunos beneficios que aportan los juegos de mesa sumados a la diversión, risas y recuerdos memorables con familia y amigos:

 

·         Concentración y motricidad fina: Actualmente, dirigir la atención total hacia una actividad en específico se ha convertido en todo un reto. Por lo que juegos como Jenga y Operando, diseñados para atreverse y poner a prueba la concentración y la precisión al sacar cada pieza sin perder en el intento, dan cuenta de ello.  Pues controlar la tensión y emociones que tanto se generan en el ambiente no es nada fácil, pero contribuyen a mejorar estos aspectos, así mismo como la coordinación y la observación. 

·         Tolerancia a la frustración: sentir que todo se derrumba al perder la partida es un sentimiento inevitable. Sin embargo, es un beneficio transversal a todos los juegos, pues estos en su mayoría están diseñados para que uno o varios jugadores obtengan la victoria y los otros la derrota, de este modo se fomenta la asimilación del resultado en función del juego y se logra manejar competencias como la paciencia, el enojo, la impulsividad, entre otros aspectos que son parte del día a día en los hogares. De modo que, visto de esta manera, no se pierde nada del todo. 

·         Capacidad de análisis y toma de decisiones:  mirar directamente al oponente y al tablero mientras pasan mil ideas en la mente para ganar, hace parte de la capacidad de procesar la información para convertirla en múltiples estrategias y posterior toma de decisiones. Un clásico como lo es Monopoly con su mundo de propiedades y bienes raíces da cuenta de ello, al igual que Connecta 4, Clue o el mismo Adivina Quién, donde el punto conector de todos estos radica en la observación, análisis y tomar la decisión que resultará en un grito, llanto o hasta en asombro. 

·         Planeación y trabajo en equipo: Si bien aún debemos conservar el distanciamiento social, juegos en grupo como Twister unieron todavía más a los miembros de la familia y les permitió pasar momentos llenos de diversión. Puesto que la colaboración en equipo y el contacto físico aportan gran valor a las relaciones humanas, se establecen dinámicas de cooperación donde todos pueden llegar al mismo objetivo y fortalecer factores claves como la empatía, la confianza y la reciprocidad. 

·         Agilidad: Hace un año los deportes y actividades al aire libre en donde se reforzaban las habilidades físicas tuvieron que adaptarse al interior de los hogares. Por lo tanto, cientos de familias apelaron a la recursividad para no dejar de lado este aspecto. Partiendo de esto, Hasbro unió dos de los deportes más famosos del mundo, el fútbol y el baloncesto, en un mismo juego de mesa: Fubtbolcesto. Estos juegos que desafían habilidades motrices y la capacidad de respuesta automática son los ideales para demostrar agilidad y crear las partidas más emocionantes.

 

Por otro lado, pasar momentos agradables con familia y amigos, compartiendo una comida y hablando mientras se juega puede tener repercusiones positivas como la buena comunicación y socialización, mejora la autoestima, reduce el estrés, aumenta la creatividad y, por último, se fortalecen habilidades cognitivas y motrices que tienen como resultado desenvolverse mejor en las situaciones de la vida cotidiana. 

Finalmente, a pesar de que las medidas restrictivas a causa de la pandemia en la mayoría de los países disminuyeron su intensidad, miles de hogares deben seguir cuidando de sí mismos.  Por lo que Hasbro Gaming lanzó por medio de su campaña “Buenos Recuerdos Incluidos” un llamado para revivir grandes momentos en familia y demostrar que los mejores beneficios radican en los vínculos afectivos que se forman en torno a estos.


Información e imágenes:  Prensa HASBRO

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