Crónicas de cómo cambiar el bullying por loving en Colombia

 Hoy por hoy, el conocido ‘bullying’, acoso o intimidación escolar, se ha normalizado no sólo a los ojos de quienes son intimidados, intimidadores o testigos de la intimidación sino ante toda la sociedad. Además, con el auge digital, dada la coyuntura sanitaria que vive el país, es cada vez más común encontrar casos de acoso en social media o ambientes digitales. Para quienes piensan que esta problemática es normal o quienes la desconocen, vale la pena responder una pregunta: ¿Qué se siente vivir el bullying?


 

Pensando en esto, Nosotras, marca líder en el cuidado íntimo femenino de Grupo Familia, a través de la tercera edición de su campaña ‘Bullying Por Loving’, comparte los siguientes casos reales de personas que vivieron en carne propia esta problemática pero lograron cambiar el bullying por loving con el propósito de empoderar a quienes son o han sido intimidados en el colegio, ratificándoles que no están solos e invitándolos a que se acepten como son, enfrenten sus temores y busquen ayuda para solucionar la situación desde una perspectiva integrada, es decir involucrando a todas las partes.



 

Valeria, 14 años - Cuando el físico se convierte en una razón para herir a los demás

 

Desde pequeña siempre me pregunté qué era lo malo de ser una persona bajita, mis compañeros hacían comentarios de mi estatura como si de algo indigno se tratara, me preguntaban “¿cómo está el clima allá abajo?” y me gritaban “enana” ¡enana! Y ¿qué tienen de malo los enanos? Me inquietaba. Honestamente, nunca fui de muchas amigas y, a medida que fui creciendo, disfrutaba más mi soledad, recrear mis propios momentos y jugar con lo que tuviera a la mano, por lo que me sumergí en el mundo del maquillaje; tener la capacidad de poder crear a través del arte de maquillar era mi mejor recompensa al llegar del colegio, después de escuchar tantos comentarios que me hacían sentir menos persona.

 

Mi forma de ser y de ver las cosas ahora que estoy un poco más grande no se las atribuyo al bullying que aún recibo. Siempre he sido muy tímida y poco sociable, sentimientos que aumentaron tras la muerte de mi papá. Recuerdo que, en medio de mi dolor, escuchaba murmullos de que me había quedado sola y huérfana, situación que hizo apegarme mucho más a mi mamá. Ella es mi mejor amiga y mi apoyo, gracias a ella empecé a cambiar el bullying por loving.

 

Los comentarios que he recibido han dejado de tomar importancia desde que sigo la campaña; una vez en medio de mi impotencia le regalé una manilla de Nosotras® a una niña que me molestaba, días después ella la llevaba puesta y replicaba el mensaje. Entendí que enfrentar la situación con amor propio, confianza y seguridad, puede hacer que las cosas también cambien.



 

Paulina, 8 años – La imaginación un arma poderosa para enfrentar los miedos

 

Mi mamá dice que soy una niña muy inteligente, carismática y un poco habladora, me gusta mucho expresarme y decir todo lo que pienso. En el colegio disfruto mucho el tiempo con mis amigas y las clases, mi favorita es ciencias porque me parece interesante todo lo que en ella puedo aprender, también dibujo; me gusta dibujar todo lo que se me ocurra, de hecho, estoy intentando hacerlo de una manera más profesional. El anime es de mis caricaturas favoritas porque me identifico con las guerreras legendarias.

 

Y así me considero, toda una guerrera legendaria, aunque apenas tenga 8 años entiendo todos los comentarios que hacen de mi físico, a veces me parece normal, pero siento que no deberían hablar mal de mí, sin conocerme. Un día mis compañeros me hicieron llorar, porque según ellos, por mi estatura no era apta para jugar, otros niños se rieron de mí y yo simplemente no entendía por qué me trataban así – ¡si yo puedo jugar todo! -. Aunque después de eso, me dediqué con mi mejor amiga, Antonia, a armar escudos imaginarios para no prestarle atención a los comentarios de ellos; ella y yo nos apoyamos y nos defendemos juntas de los niños que se burlan de nosotras.


 Mis papás me han mostrado los videos y las charlas de Bullying por Loving y me gustó mucho porque sé que tengo poderes, puedo volverme más fuerte, he ignorar y lograr todo lo que quiera, me da mucha risa porque ya no me da miedo responderles cuando me critican.



 

Andrea, 23 años – La resiliencia, la autoaceptación y el amor fueron mi salida

 

Mi historia, para muchos, puede ser superficial, pero nadie sabe con lo que debemos cargar las personas a las que nos critican por nuestro físico. Tenía 15 años cuando sufrí de acoso en el colegio, por mis ¡propias amigas! quienes cada tarde de sábado llegaban a mi casa para hacer cosas de chicas.

 

Las redes sociales se convirtieron en mi peor enemiga, o por lo menos quiénes las utilizaban con la intención de herirme. Me llegaban mensajes desagradables, sobre mi contextura, mi color de piel y mis dientes - ¡Sentí caer! - era una sensación entre cansancio, debilidad y resistencia, porque a pesar de todo yo no veía nada de malo en mí. Fueron momentos difíciles, llegué a verme obligada a cambiar de colegio, pues los profesores y las directivas no tomaron las medidas que debían. Mentiría si les digo que no me importó, es la hora y hay momentos que se vienen a mi cabeza y siento que aún repercuten en mí.

 

Hoy, después de muchos años no recuerdo esos instantes con tristeza, ni rencor, fueron una etapa que decidí dejar atrás, que dejaron enseñanzas; me tocó aprender a ser empática y a no minimizar el dolor ajeno. Yo, ahora por la vida, voy cambiando el bullying por loving porque a pesar de los desprecios, he vuelto a conversar con quienes me hicieron daño, aunque de pronto ellas aún no entiendan por lo que pasé, comprendí -gracias a esta iniciativa- que de mí depende mi propia felicidad.



 

“De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), 1 de cada 5 niños ha considerado dejar de asistir al colegio por el acoso escolar que ha sufrido en la virtualidad y ante un inminente regreso a clases, ya sea virtual, presencial o con un modelo de alternancia, es vital que los niños, jóvenes, padres de familia, profesores y demás actores del ecosistema educativo, comprendan que no deben normalizar el bullying, sino, todo lo contrario, hay que luchar contra él, empoderando a quienes lo sufren, invitando a la reflexión a quienes lo ejercen, promoviendo buenos valores y actitudes y privilegiando un lenguaje positivo, inclusivo, diverso, comprensivo, un lenguaje desde el amor propio y por el otro”, afirmó Susana Alzate Múnera, Líder del Proyecto Bullying Por Loving de Nosotras en Colombia.   

Comprometidos con encontrar soluciones que promuevan una cultura de aceptación y amor propio; desde hace 4 años, Nosotras®, ha impactado a 60 millones de mujeres, en más de 3.600 instituciones públicas y privadas, llevando a cabo jornadas de sensibilización y fortaleciendo la seguridad, confianza y el pensamiento crítico en niñas, niños y jóvenes de la región con material educativo.


Información e imágenes:  Prensa NOSOTRAS


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