La navidad en Colombia se comparte en familia con natilla, buñuelos y galletas.

 Cada región del país tiene sus propios platos navideños, pero para los colombianos la navidad no sabe a lo mismo sin la natilla o los buñuelos. La temporada navideña es un momento muy especial para Maizena y por eso a finales de años llegan siempre sus preparaciones de buñuelos, natilla y desde este 2021, las galletas surtidas.  

Según Juan Martín Ramírez, gerente de mercadeo del negocio de alimentos de Unilever en Colombia “Estos deliciosos productos navideños llegan a los hogares colombianos gracias a todos aquellos que le apuestan a tener Maizena en sus góndolas. Nos llena de orgullo que más de 82.000 tenderos crean en nosotros y nos tengan en sus negocios.” 

Esta marca llegó al país en 1933 y se ha convertido en todo un ícono con su emblemática caja amarilla y con su portafolio que incluye buñuelos, cuatro sabores de natilla y ahora galletas navideñas surtidas de chocolate y vainilla que hoy son protagonistas de la temporada navideña de muchos colombianos.  

“La temporada navideña 2021 ha sido muy positiva y vemos que los colombianos se preparan nuevamente para celebrar la navidad con su familia y amigos. Al final de la primera semana de diciembre ya habíamos vendido 400 mil unidades más que en toda la temporada navideña 2020. Este éxito para Maizena se explica en parte por la llegada a nuestro portafolio de las deliciosas galletas navideñas,” agrega Ramírez.   

Tradición de la natilla en Colombia 

En el caso de la natilla muchas son las formas de hacerla, pero Maizena fue uno de los pioneros en comercializar una mezcla lista para elaborarla en pocos minutos, poniéndola al alcance de cualquier persona para prepararla sin el temor de fallar en su receta. 

Ramirez complementa que, “Año tras año, acompañamos a millones de colombianos con nuestras deliciosas natillas Maizena. Muchos la preparan de manera tradicional y le agregan uvas pasas, canela o coco, pero hemos visto que la natilla Maizena de arequipe es la favorita de los colombianos.”  

Pero ¿desde cuándo los colombianos consumimos natilla y de dónde viene esta costumbre? Julián Estrada, antropólogo, cocinero e investigador, asegura que la natilla es la derivación de una costumbre muy presente en el mundo: endulzar la leche con azúcar. “Esa práctica, por supuesto no era de la cocina indígena sino de las españolas y africanas, que además le agregaron canela. Acá, en el Nuevo Mundo, le añadimos el maíz en medio del proceso del mestizaje entre los fogones”, agrega Estrada. 

Debido a su antigüedad y su paso por varias manos, este postre tradicional tiene miles de variaciones y recetas que incluyen merengue a base de huevo, caramelo, galletas, almendras, vainilla, plátano, frutas cítricas, chocolate blanco y turrón, entre muchas otras, y de igual manera tiene diversos trucos en sus puntos de cocción como su preparación al baño María, que es un procedimiento tradicional hoy adoptado por los chefs de la alta cocina. 

El buñuelo navideño 

Al igual que la natilla y como producto de la transculturización, las bolitas esponjosas elaboradas con base en la harina de un cereal y freídas en aceite, que hoy llamamos buñuelos en Colombia, también llegaron a nuestro territorio desde la época de la conquista pues ya habían sido heredadas por los españoles a través de la influencia culinaria de los moros que habitaron el sur de la península Ibérica durante más de ochocientos años.  

Desde su llegada a América, se adoptó el maíz como su materia prima y su técnica de preparación ha trascendido a través de las generaciones desde las manos de las cocineras africanas hasta hoy, a tal punto que, por ejemplo, el buñuelo costeño es una versión casi exacta de los akkra, muy populares en Ghana, Togo, Benín, Malí, Gambia y Nigeria.  

“Millones de personas también disfrutaron de buñuelos como parte de su celebración de Navidad. Su sabor característico es símbolo de la llegada de diciembre. Desde Maizena estamos comprometidos con llenar de sabor las celebraciones de fin de año de los colombianos, porque sabemos que no ha sido un año fácil y todos necesitamos de la compañía de nuestra familia y amigos, ojalá alrededor de mesas llenas de deliciosos platos” concluye Ramírez, gerente de mercadeo del negocio de alimentos de Unilever en Colombia.  

 Información e imágenes: Prensa UNILEVER